Cada uno de los detalles que componen a la Fuente de Neptuno en la Macroplaza tienen un significado especial.
Desde su inauguración en 1984, la Fuente de Neptuno (O Fuente de la Vida como también la llaman) ha sido un elemento muy importante del centro de la ciudad de Monterrey.
El objetivo de la escultura de bronce, a cargo del escultor español Luis Sanguino, fue el de conmemorar el plan hidráulico que se creó para abastecer a la ciudad de agua, conmemorando a quienes lucharon contra la escasez e hicieron sacrificios por asegurar el abastecimiento del agua metropolitana.
Ubicada en el corazón de nuestra querida Macroplaza, la Fuente de Neptuno ofrece una vista excepcional por todos los elementos que habitan en ella.
Aquí te explicamos sus detalles:
Como su nombre lo dice, la fuente retrata al dios romano de los mares, Neptuno, quien se encuentra sobre un imponente carruaje que va guiado por caballos marinos de la mitología.
A su alrededor Neptuno se deja acompañar por cinco mujeres disfrutando del agua que emana, cada una a su manera, representando con ello ninfas de la mitología griega emocionadas y agradecidas por el líquido.
En la parte frontal se puede ver a una mujer que porta una caracola, representando con ello el sonido del agua. Asimismo, esa misma mujer posa sobre un león, el cual representa a nuestro Estado, y lo corona como símbolo de su triunfo en la batalla del agua.
No solo es Neptuno y las ninfas. También puede observarse a un niño sosteniendo un pez, y uno más con un cuerno de la abundando. El papel de ellos es precisamente el de representar la abundancia tanto de los peces como del agua en Nuevo Léon, que llegan a través del Cerro Prieto.
Son 15 toneladas las que pesa dicha escultura, y se necesitan 250 metros cúbicos de agua para su abastecimiento.
Polémica
Durante sus inicios, la fuente fue rodeada de críticas debido al hecho de que haya sido Neptuno, figura de la mitología griega, quien representara este aspecto de Nuevo León, en lugar de haber optado por Tlaloc, Dios Azteca del Agua y de la lluvia, sin embargo, con el tiempo se fue disolviendo este conflicto y la población terminó por aceptar la Fuente de Neptuno con su magnífica belleza.