Tras más de un año de trabajos, el Gobierno de Nuevo León entregó la restauración del Arco de la Independencia, uno de los símbolos arquitectónicos más representativos de Monterrey, ubicado en el cruce de Pino Suárez y Madero.
Proceso de rehabilitación en dos fases
La restauración se llevó a cabo en dos etapas basadas en estudios técnicos, escaneo láser 3D y análisis históricos. La primera fase consistió en la recuperación de las esculturas metálicas, incluida la estatua de la “Alegoría de la Libertad”, conocida popularmente como “La Mona”, además de las águilas que flanquean el monumento. La segunda etapa se enfocó en la conservación de la cantera proveniente de San Luis Potosí con la que originalmente fue construido el arco.
Inversión para la preservación cultural
El proyecto tuvo una inversión de 20 millones de pesos y buscó rescatar tanto el valor arquitectónico como cultural del monumento, preservándolo como parte esencial de la identidad histórica de Nuevo León.
Acto de entrega y relevancia turística
Durante la ceremonia de entrega participaron autoridades estatales y federales, quienes destacaron la importancia de mantener en óptimas condiciones este referente urbano. El acto incluyó un espectáculo de video mapping acompañado por el “Corrido de Monterrey”.
Patrimonio rumbo al Mundial 2026
El Arco de la Independencia, edificado en 1910 por iniciativa del entonces gobernador Bernardo Reyes, será también un atractivo turístico en el marco del Mundial de la FIFA 2026, cuando Monterrey reciba visitantes nacionales e internacionales. Con más de un siglo de historia, el monumento vuelve a lucir renovado como emblema cultural de la ciudad.

